Para los Pitagóricos el universo se componía de números, siendo el número 1 considerado como el creador de todo lo demás. Para ellos, los números podían ser naturales (1,2,3,...), enteros (...-3,-2,-1.0,1,2,3,...) y racionales (fracciones de números enteros) y tenían la creencia de que eran suficientes para mostrar cualquier relación numérica existente en el universo.
¿De dónde procedía esa convicción en la fuerza de las cifras?
En los estudios de las escalas musicales se descubrió que los tonos poseen una relación estrictamente numérica entre sí. Así, cuando se recortaba la cuerda de un instrumento musical en la proporción 2:1, resultaba la octava. De este importante descubrimiento musical se dedujo que toda armonía de la naturaleza se basaba en una relación numérica, resultado que también debía ser válido para la geometría.
Ironías del destino, pues sería precisamente el teorema de Pitágoras el responsable de que se cuestionaran toda la teoría pitagórica.
¿De dónde procedía esa convicción en la fuerza de las cifras?
En los estudios de las escalas musicales se descubrió que los tonos poseen una relación estrictamente numérica entre sí. Así, cuando se recortaba la cuerda de un instrumento musical en la proporción 2:1, resultaba la octava. De este importante descubrimiento musical se dedujo que toda armonía de la naturaleza se basaba en una relación numérica, resultado que también debía ser válido para la geometría.
Ironías del destino, pues sería precisamente el teorema de Pitágoras el responsable de que se cuestionaran toda la teoría pitagórica.